Photo: Adrianne Lenker
Pisando la famosa tierra de nadie, noviembre avanza como el mes del desconcierto, en el que no reconocemos con exactitud si vivimos otoño o invierno, o un puente entre ambos. Seguimos sin saber bien dónde nos encontramos, amén de la distopía general que nos rodea, pero sólo esto es cierto: redescubrir la música que ha acompañado durante este chocante -aunque realmente creativo – 2020, es un pequeño milagro antes de Navidad que puede salvarnos un poco, a tiempo, la pérdida total del Norte.
La mujer Libra se escolta de estos music picks en la última fase:
UMA – LUCY LU
De orígenes thai y británico, la jovencísima UMA vuelve a impresionarnos rápidamente tras su cautivador y preciosista EP debut, Bel.li (Slow Dance Records, 2020), pero esta vez junto a su partenaire musical Lucy Lu (Luke Bower) con quien ha co-escrito un nuevo EP en su refugio de Can Obert, en la quietud campestre del Empordà catalán, y que verá la luz en Febrero. Un avance de su próximo trabajo conjunto, es Black Bees, este single que, seguido del reciente y magistral Bring Me The Mountain, ha sabido materializar un halo ondeante de folktrónica y exploración de pop profundo, elegante y cálido, conversando sobre el amor real entre susurros; un flujo de géneros que se jactan precisamente de no encontrar una tag musical en la que esconderse por mucho tiempo. Letras a flor de piel, voces buscando un equilibrio en la sensibilidad y lo incierto: Un dúo exquisito que, pese a su brevísima trayectoria, no ha dejado indiferente a medios como BBC Introducing o Tidal Spain:
MARIKA HACKMAN
Que Marika Hackman era una de las artistas más reconocidas en las listas de música alternativa de Reino Unido ya lo sabíamos, y que su género no se amedrenta ante la versatilidad creativa, tampoco, aunque recibir casi al terminar la última etapa del año esta joya de versiones titulada, simplemente, Covers by Marika Hackman es un fresco plot twist que sorprendentemente nos coge desprevenidos – de nuevo – y nos excita por igual, como la primera vez que la escuchamos. Y ése es su objetivo. Cuando menos te lo esperas, Marika aparece con una inusual colección de temas donde su oscuro sello personal va fluctuando según su ánimo y su fuerte afinidad con lo nostálgico. Por eso este álbum resulta un gran acierto. Fraguado durante la cuarentena y con favoritos de culto que van desde Beyoncé a Grimes, nuestra cover favorita del disco es Playground Love, aquel clásico de Air que envolvía en el desánimo a las inapetentes hermanas Lisbon en Las Vírgenes Suicidas, de Sofía Coppola. Synth spirit. Marika también escoge sus picks sabiamente.
ADRIANNE LENKER
¿Habéis escuchado songs?
Las suyas. La sencillez vocal y el carisma de Adrianne Lenker, que se tornan familiaridad al final, tras unas pocas escuchas. La vocalista de la extraordinaria banda de Brooklyn, Big Thief, quizá una de las más escuchadas en los últimos años no sólo en la escena independiente de medio mundo (esa clase de bandas que llegan sin hacer ruido para quedarse para siempre), trae en su petate de bosque un nuevo disco, esencialmente acústico, sin grandes pretensiones de
producción, pero que en cuya humildad y fragilidad reside su gran fuerza compositiva. Adrianne sabe cómo ser delicadamente discreta, y respeta sus propios sentimientos como quien se queda escuchando la lluvia toda la noche sólo por lo mágico o importante que esto supone. Sin contradicciones y con mucha honestidad, como siempre le han definido sus canciones, este disco conoce la fórmula del alivio ante los tiempos difíciles, cantando a un vacío que ella conoce muy bien, pero que cubre de letras preciosas para subsanarlo, y para escucharse a sí misma.
DOLLY PARTON
Concesión de última hora. Y no solamente por lo kitsch que Dolly F***ing Parton suponga a los ojos de las audiencias por su apariencia, o a riesgo de sonar oportunista, hemos de reconocer que el legado de la leyenda femenina del country tampoco nos suelta la mano, y no sólo metafóricamente: ella ha sido la principal benefactora del desarrollo e investigación de la vacuna Moderna contra la COVID. Rescatamos uno de sus clásicos más alegres y queridos de los 70, lanzado en dueto junto a Chet Atkins.
Larga vida a la inolvidable Dolly. En lacónicas palabras de su amiga Florence Welch: otro pequeño milagro antes de la Navidad.